Volvemos a lo mismo

Esta vez me quiero referir al artículo que escribió la periodista Andrea Aguilar en la Nación. Otra crítica más de las enviadas al mundial Kathryn Arbenz y Johanna Ortiz de Repretel.

La histeria de la colega es evidente: enojo por la labor pobre y ridicula que éstas dos modelos realizaron en el mundial. Una histeria que vivimos todos los costarricenses y me incluyo.

Sin embargo, y con mucha humildad, me gustaría expresar que ninguna de ellas dos son parte de la competencia. Ellas fueron enviadas con el propósito de entretener y de hacer ese periodismo que llamamos "light" y no eran las encargadas del grueso de deportes del canal. Sino que su presencia en Sudáfrica era con el fin de atraer audiencia.

Y lo lograron, porque que yo sepa, muchos las vieron y hasta se dieron la tarea de subir sus videos y comentarlos en las redes sociales, poniendo en ridiculo al país en toda la orbe como si fuera un orgullo nacional. O sea, le dimos la importancia que no merecían.

¿Que alguien más inteligente lo pudo haber hecho mejor? Ciertamente, pero Fernando Contreras (presidente de Repretel) así no lo quiso y no hay manera que lo pueda obligar.

No creo que solo las mujeres siliconadas tengan la oportunidad en el periodismo, admitamos que hay personas no tan agraciadas en el medio, sin herir los sentimientos de nadie, pero realizan las labores para las cuales sí fueron hechos.